Berberechos al vapor. Competencia al enlatado.

Los productos en lata son unos alimentos que nos proporcionan una gran comodidad a la hora de degustar ciertas comidas que o simplemente están fuera de temporada, o puedes tener en tu casa almacenado de forma óptima casi sin saber que ya tenías allí guardada esa lata.
Este procedimiento, no deja de ser un método de conservación, por lo que, desde mi punto de vista, si podemos hacer estos alimentos frescos preparándolos nosotros, nos saldrán más apetitosos, más económicos y como no, más a nuestro gusto.

Uno de estos casos es el berberecho.

Curiosidades:

 El berberecho es un molusco bivalvo, como también lo es la almeja, coquina, mejillón, navaja, ostra y vieira. 
Como su propio nombre indica, dispone de dos valvas, grandes nervios en ellas y un pie que le sirve para poder moverse.
Suelen vivir en la zona intermareal enterrados en la arena, a una profundidad media de unos 10 metros, aunque también se pueden ver en las desembocaduras de los ríos. Su alimento son pequeños animales y fitoplancton, que filtran mediante branquias.
Crecen a gran velocidad, consiguiendo un tamaño comercial ants de cumplir el primer año. El mayor tamaño que pueden conseguir está entre los 4 – 5 centímetros.

Forma de preparación:

Este molusco puede ser preparado y utilizado en distintas preparaciones, como pueden ser arroces, en empanada (como es típico en la Comunidad Gallega), en salsa de distintos tipos, aunque la más utilizada es en salsa de tomate.
Nuestra forma de preparación va a ser la más simple y quizás donde se le saca el mayor partido al berberecho porque se presenta el potencial de este dejándolo en un punto de cocción en el que quede jugoso y con un toque a limón espectacular. Vamos a hacer los berberechos al vapor.

Para prepararlos de esta forma (así como en todas las demás), lo primero es lavarlos para que pierdan la tierra que inicialmente pueden traer, ya que como hemos mencionado antes viven enterrados en arena.
El proceso de limpieza es muy sencillo, en primer lugar le damos un baño de agua dulce bajo el grifo frotándolos entre ellos para quitar restos que puedan tener en sus conchas tanto de tierra como de cualquier otro origen.
Tras el primer enjuague, se disponen en un cuenco profundo echándole agua, sal y vinagre, emulando así a la tipología de agua marina para facilitar la filtración de su interior al hacer pasar el líquidos por ellos. Así estarán un tiempo considerable que les de tiempo a depurarse y soltar la arena de su interior. Puede valer entre 1,50 h y 2,00 h.
Cuando ha pasado ese tiempo, colocamos el cuenco debajo del grifo y comenzamos a enjuagarlos de forma abundante para, primero quitar la arena y restos que han dejado en el recipiente y en sus conchas y, segundo, hacer desaparecer el vinagre que pueda afectar a la hora de la preparación (en el plato que vamos a preparar hoy no influye en ninguno de los casos).

Una vez limpios, los berberechos tienen una elaboración mínima ya que los ingredientes a utilizar son, simplemente agua (en poca cantidad) y limón en una cantidad más llamativa.
Se utiliza una olla profunda en la que mojamos con agua la base simplemente tapandola. Se echan los berberechos limpios tal y como hemos mencionado antes y se riega de zumo de limón. Con el limón podría poner cantidad pero es según te guste el sabor de este y el jugo que tenga cada uno de los limones. En principio, para medio kilo, se podría utilizar un limon y medio o dos limones.
Cuando ya se ha realizado esta operación, se pone a fuego fuerte y se tapa, dejando que se vayan abriendo mientras se controla, hasta que se saque al plato para poder degustarlos.

Como podéis ver, la elaboración es muy muy sencilla, por lo que hay veces que tiramos de conservas por desgana y desanimo de meterse en la cocina tan sólo 10 minutos.

Presentación:

La presentación de este plato es muy agradecida, ya que la concha del berberecho le da al plato una imagen desigual que parece montado a propósito. Se puede acompañar de una rodajita de limón para mostrar el otro ingrediente utilizado en el plato.
Las presentaciones simples en estos casos son también valiosas, ya que no siempre tienen que ser presentados como platos de autor. Los bivalvos dan por sí mismos una imagen bonita cuando se colocan en un plato, quizás lo que haya que elegir es un recipiente adecuado.

Consejos:

Al prepararse con fuego fuerte y tener limón en su interior, hay que tener mucho cuidado de que no rebose la espuma de limón que se crea, ya que puedes ensuciar de forma importante la cocina.
A la hora de servir, el líquido que existe en el recipiente es una mezcla entre jugo de limón y el expulsado por el molusco durante su cocción. Recomendaría que se utilizara un plato hondo para evitar que se derrame, en caso de querer servir con dicho jugo.

¡Podemos hacernos la vida mas fresca y no enlatarnos en lo cotidiano!. Solo son ganas.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s