No seré yo quien os quiera recomendar algo malo para la salud, no insistiré en algo que os haga ganar en volumen de abdomen, no querré venderos algo que no constituya ni esté formado por algo natural. Así soy y por eso, me declaro seguidor aférrimo de nuestra cultura cervecera, de nuestra terracita con una caña bien tirada con su dedo de espumita……mmmmm
Por esto, ¡os quiero presentar los beneficios de este «oro líquido» que nos acompaña en muchos momentos importantes!.
Beneficios de la Cerveza:
La cerveza, como todos sabéis es una bebida natural que, en contra de los pensamientos de muchas personas y de los bulos lanzados sobre ella, tiene pocas calorías, poco alcohol y nada de grasas ni azúcares. Sorprendentemente, sí es rica en hidratos de carbono, proteínas y vitaminas, por lo que obviamente, su consumo moderado puede ser beneficioso para la salud.
Según estudios recientes, y no tanto, se le pueden atribuir gran cantidad de beneficios para el cuerpo humano. Enumeramos los más destacados:
– Salud cardiovascular: Siempre el uso moderado, puede tener efectos antiinflamatorio y aumentar el colesterol bueno, ayudando al organismo a combatir enfermedades cardiovasculares.

– Salud neuronal: Estudios han demostrado que puede tener efectos frente a enfermedades degenerativas, ya que el silicio que antes hemos comentado podría llegar a reducir la biodisponibilidad de los metales tóxicos que provocan estas enfermedades.
– Oncología: Debido a uno de los polifenoles que posee (Xanthohumol) podría realizar una actividad quimiopreventiva frente a ciertos tipos de cáncer.
– Sistema Inmune: Beneficia a este sistema atacando a los agentes responsables de ciertas enfermedades infecciosas.
– Efectos antiinflamatorios: Como hemos mencionado en el primer punto, el Lúpulo que posee tiene propiedades antibacterianas y antiinflamatorias que actúan contra enfermedades relacionadas con el envejecimiento.
– Dietas hiposódicas: Tiene un alto poder diurético debido a la baja cantidad de sodio que posee y en contraste el potasio que contiene.
– Salud gástrica: Ayuda al vaciado gástrico debido a que incrementa la secreción de estos ácidos, actuando así contra la úlcera gastroduodenal.
– Alto contenido en fibra: El consumo moderado de cerveza podría llegar a cubrir los requerimientos de fibra soluble, siendo la bebida alcohólica con mayor beneficio en este sentido.
– Baja aportación calórica: Como hemos mencionado al principio, contiene baja cantidad de calorías (42 kcal por cada 100 ml).

Con todos estos beneficios que hemos visto, está claro que se cae un mito como el de la «barriga cervecera». Está claro que este caso se debe más al acompañamiento de la cerveza que a esta misma y/o a una dieta desequilibrada.
Visto lo visto, y con lo que ha llegado del «Decretazo», prefiero ir a un bar a tomarme una cerveza, que a la farmacia. ¿Qué opináis vosotros?.
¡Si Homer no podía estar equivocado!,¡Una birrita, por favor!