Vamos a hacer un platito fácil y rico, buscando la diferencia de los típicos revueltos en el que el huevo es el punto de fusión de todos los demás ingredientes. Vamos a hacerlo más fácil aún y distinto a lo habitual. ¿Qué necesitamos?.

Ingredientes:

• 2 pimientos verdes no muy grandes.
• 2 dientes de ajo.
• 1/2 pimiento rojo.
• 1 cebolla pequeña.
• 1/2 puerro.
• 50 -7 5 g de bacon en taquitos.
• 2 rebanadas de pan de molde.
• Perejil picado.
• 1 cucharadita de café de pimentón picante o dulce (opcional).

Elaboración:

La realización de este plato es súmamente fácil. Para ello, vamos a picar en primer lugar los elementos que lo forman. Picamos los pimientos en trozos contundentes, que no sea una brunoise pequeña.

La cebolla de igual manera, la troceamos y el puerro lo cortamos en rodajas. El ajo si lo picamos pequeñito.

Una vez que tenemos estos elementos picados, ponemos una sartén con aceite y echamos en primer lugar el ajo, luego la cebolla y el puerro y seguidamente los pimientos. Lo bueno que tiene este revuelto es que la textura de las verduras la eliges tú al gusto, al dente o muy hechos, así que tú eres el que debes decidir el tiempo.

Añadimos también el bacon con tiempo suficiente para que se nos haga sin que no se nos queme.

Por otro lado, en una sartén con aceite caliente, echamos el pan de molde troceado en cuadraditos no muy grandes, añadimos perejil picado (y el pimentón si lo queremos añadir a última hora) y una vez fritos los «picatostes» los añadimos a la verdura justo al final del proceso.

Presentación:

Plato llano, y revuelto sencillo. ¿Quién dijo que los revueltos tienen que llevar huevo?.

Rociamos con un chorrito de aceite y decoramos con una ramita de perejil y plato hecho, bien rico, sencillo y sano.