Hoy nos vamos a ir de nuevo a Málaga, pero esta vez a la capital, a la Calle Comisario, muy muy cerca del centro de la ciudad de la Costa del Sol. Vamos a degustar los platos de la Marisquería Vicente.

La verdad es que pocas palabras merece este local, porque es de sobra conocido en la ciudad, por su calidad en marisco y en «pescaíto». Lejos de ser un bar para turistas (puede parecer por la presencia que tiene) es un local dividido en dos zonas, una de barra en una de las aceras de la calle y otra de mesas en la contraria.

La verdad es que la imagen en cuanto a mesas no la cuidan demasiado, quizás sea uno de los reclamos más de este tipo de bares. Yo soy de la opinión que cada bar debe tener su identidad, su presencia y su toque que le dé ese puntito especial y las mesas de aluminio de este bar le dan un toque extrovertido y distinto a lo que venimos viendo de forma habitual.

Lo calificaría como un lugar donde disfrutar del marisco, sin más, sin complicaciones. Lo importante no es la decoración ni los camareros (que por cierto son muy buenos), lo realmente destacable es la calidad que puedes degustar, al precio que te lo ofrecen, que para nada es alto.

Sin duda, les animo a que visiten este rincón, porque unas gambas plancha, o cocidas, o cualquier otro procedente del mar, les puede hacer disfrutar muchísimo en Marisquería Vicente. Por ello, debe estar en nuestra lista de «Vámonos de tapas», por su calidad/precio y porque ya se aproxima la buena época para visitar la costa.