Vamos a poner una nueva forma de hacer unas setillas que tengas en la nevera. ¿Porqué no las mezclamos con algo que podamos tener también y así crear un plato nuevo?. Pues eso es lo que hemos hecho, hemos creado un plato de cuatro cosillas que teníamos y hemos hecho una mezcla muy muy rica.

Ingredientes:

• 100 – 150 g de setas.
• 75 – 100 g de corazones de alcachofas de bote.
• 10 – 15 tomates cherry.
• 1 guindilla roja y 1 guindilla amarilla.
• Albahaca fresca.
• Orégano picado.
• 1 chorreón de vino blanco.
• 1 diente de ajo.
• Aceite de oliva virgen y sal.

Elaboración:

Para hacer este plato vamos a empezar por poner en una sartén con aceite de oliva el ajo picadito a freir. Sin esperar a que el ajo se nos pase, ponemos en la sartén las setas y removemos de forma continua para impedir que el ajo se nos queme y hacer que las setas se nos impregnen del sabor del ajo.

Añadimos las dos guindillas troceadas en aritos, justamente después que las setas para que vaya también cogiendo ese toque de pique (he de decir que estas guindillas no tienen un excesivo pique por lo que se pueden echar ambas).

Removemos y echamos la albahaca fresca picada en trozos medianitos y el orégano picado. Echamos un chorreón de vino y le damos el toque de sal. En este momento, ponemos los tomates cherry para que se nos queden tiernecitos y le de una textura muy interesante al plato.

Dejamos unos minutos que el vino vaya evaporando y justo en el momento final, añadimos las alcachofas, unos 4 – 5 minutos antes de apartarlo. Corregimos de sal al gusto y terminado.

Con estos simples pasos, hemos hecho un plato muy sencillo pero que está muy muy bueno y se puede considerar una forma distinta a las ya clásicas de presentar las setas.

Presentación:

Hemos escogido un plato que de vivacidad al contenido y que haga contraste con este. Para decorar, hemos puesto una guindilla verde y sin más, ya tenemos este rico plato para poder saborearlo.