Hoy voy a presentaros un gran descubrimiento para mi. Gracias al evento de #IlikeCordoba que habéis podido seguir en las distintas redes sociales (@MyHyMC) e incluso en varias entradas aquí en el blog, he tenido la suerte de sorprenderme con tres restaurantes de nuestra ciudad que por diversos motivos, aún no había conocido (como dirían en Pamplona……Pobre de mi). Estos tres hallazgos por mi parte os lo presentaré en distintas entradas para así dedicarle a cada uno de ellos la importancia que merece y destacar lo que considero más interesante.

En primer lugar me centraré en Bodegas Mezquita.

¿Como definiría a Bodegas Mezquita? Una buena definición sería la de una Taberna con solera, con embrujo cordobés, situación incomparable, gran producto y servicio y una iniciativa digna de mención en el mundo hostelero. Pero no me quedaré en esta escueta descripción ya que quiero extenderme en cada uno de los puntos que he mencionado.

Está claro que Bodegas Mezquita es una taberna con solera y arraigo en nuestra capital porque su fundación se remonta a los años 60, pero fue posteriormente cuando Baldomero Gas (hoy gerente de las Bodegas) evolucionó un negocio de venta de licores y vinos a un foco gastronómico, convirtiendo una empresa de distribución gourmet en un lugar de encuentro con una amplia oferta culinaria.

Así, hoy en día, en las Tabernas Restaurante de Bodegas Mezquita reina una cocina tradicional, esencia de la gastronomía más andaluza.

Siendo como es, un referente de la comida de nuestra tierra nos presenta productos de alta calidad como son las joyas propias del territorio cordobés: jamón ibérico, queso de oveja, salmorejo, rabo de toro, carnes del Valle de Los Pedroches, su aceite de oliva virgen, o los vinos generosos de Montilla Moriles, entre otros muchos. De primera mano os puedo decir que las berenjenas con miel de caña son unas de las más buenas que he podido probar hasta el día de hoy (sí……..#soydeberenjenas).

Yo soy de los que consideran que el producto por sí solo no hace que la oferta que realiza un establecimiento sea merecedora de una visita. He visto lugares en que el ingrediente era de gran calidad (no se puede discutir este concepto) pero ni la elaboración del plato, ni el servicio merecían la pena. He aquí otra de las grandes sorpresas que pude disfrutar en mi visita a Bodegas Mezquita. Todos sus trabajadores cuidan hasta el mínimo detalle, con simpatía, amabilidad, de una forma extrovertida y cercana. Sé que no se deben hacer distinciones por ser de mal gusto, pero he de destacar la calidad humana y profesional del camarero al que le toqué en gracia que creo recordar que se llamaba Juanjo (si me he equivocado en el nombre pido disculpas, porque hablo de memoria), pero insisto, el servicio, con Baldomero a la cabeza, quizás sea una de las mayores distinciones de las que goza este bonito restaurante.

Yo me atrevería a decir que Bodegas Mezquita cayó del cielo, porque no se podían conformar nada más que con un lugar parecido para buscar su emplazamiento. El barrio de la judería, al pie de la Mezquita Catedral de Córdoba,. En tres de los cuatro costados de nuestro emblemático monumento, esta taberna tiene un lugar para hacer las delicias de sus clientes, en la calle Corregidor Luis de la Cerda, en la calle Céspedes y en la calle Cardenal Herrero, donde disponen una tienda gourmet en la que se pueden adquirir todos sus productos más valorados. Y estando donde están, todos tenemos claro que el cielo puede esperar, porque debe ser muy parecido a comer al pie de la Mezquita.

Por último y no menos importante, quiero destacar como bloguero que soy, la iniciativa hostelera (ofrecen espectáculos flamencos) y el trabajo de marketing online que esta empresa realiza para primero, dar a conocer su producto, ofrecer sus servicios y recibir y generar valoraciones que le puedan ayudar en busca de la mejora continua que su gerente se ha puesto como meta principal. Es digna de mención porque todos sabemos que hoy en día las redes sociales son muy muy importantes, pero no todo el mundo se embarca en hacerlas una parte importante de su unidad de negocio y aquí considero que son, quizás, uno de los más activos en este sentido, realizando llamamientos, reuniones, actos o eventos que ayudan a conocer opiniones y distintos criterios para conseguir que mañana sea un poquito mejor que hoy.

Por todo ello, porque creo que cumple todos los requisitos que yo exijo para considerar un restaurante una visita obligada cuando estás en su ciudad, Bodegas Mezquita entra en nuestra lista de «Vámonos de tapas».  Me gustaría que fuérais y que me contáseis si coincidís o no con mis apreciaciones……..siempre es bueno saberlo. 😉