Vamos a hacer un entrante que es súmamente fácil y que puede dar un toque distinto a una cena con amigos. Teniendo en cuenta que es un plato en el que los mejillones los puedes tener cocidos con un poquito de tiempo, es un entrante que puede quedar tremendamente bien y que supone muy muy poco tiempo de elaboración. Pero si la receta es rápida, vamos a hacerla rápida….. ¿Qué necesitaremos?
Ingredientes:
- Mejillones.
- Zumo de limón.
- Pimienta negra en grano.
- Laurel.
- Harina de trigo.
- Cerveza.
- Perejil fresco.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal.
- Brotes verdes para servir.
Elaboración:
Como hemos dicho, la elaboración es súmamente rápida. En primer lugar debemos limpiar bien los mejillones con un estropajo metálico o cuchillo redondo quitándole las barbas bajo el grifo, desechando aquellos que estén abiertos y no se cierren y los que tengan la concha rota.
Una vez que ya estén limpios, los ponemos en una olla o cazo con zumo de limón (dependiendo de la cantidad de mejillones que hagas, pero se puede ser generoso) una cucharadita de tomillo, unos granos de pimienta y una hoja de laurel. Dejamos cocer y sacamos los mejillones en cuanto se abran para tenerlos jugosos.
Cuando ya estén cocidos, esperaremos a que se enfríen para quitarles las conchas y no quemarnos. Ya los podemos reservar en la nevera bien guardaditos y cerrados, eso sí, tampoco mucho tiempo.
Para servirlos, tan sólo nos queda hacer la masa en la que vamos a rebozarlos que se realizará mediante harina, cerveza, un toque muy corto de sal, perejil picado y pimienta negra molida. Las cantidades la iréis viendo durante su elaboración para que queda con una densidad que se adhiera al ingrediente principal.
Cogemos los palillos medianos de brochetas y pinchamos dos mejillones en cada uno de ellos. Pasamos por la masa que hemos hecho y directamente a la sartén con el aceite bien caliente. Freímos y ponemos en un plato con papel de cocina para quitarle el exceso de aceite.
Para presentarlos en un plato vamos a acompañarlos de un aceite de perejil que haremos simplemente con aceite y perejil fresco. Batimos en el vaso batidor y listo.
Presentación:
La presentación, como más os guste. Nosotros nos hemos ayudadod e unos brotes verdes y por encima de los mejillones hemos rociado el aceite de perejil, una opción muy válida y con un sabor muy muy bueno.