Hace ya algunos días tuve la suerte de disfrutar, al fin, del restaurante CómemeLosHuevos en Córdoba. Por si no lo sabéis o no lo conocéis aún, se encuentra en la calle Teruel, en la parte baja del Tablero y muy cerca de la Avenida del Brillante.

Desde mi humilde opinión, se agradece que se realicen apuestas gastronómicas de este tipo en Córdoba porque a parte de innovar, ofrecen calidad en un formato que puede ser asequible para cualquier consumidor. Cocina de toda la vida enlazada con nuevos sabores y presentaciones para hacer del huevo el punto principal de su carta. Javier Castro, gerente de «El Alma» y de «Alter Ego» nos da la opción de disfrutar de este producto en diversas formas y conceptos.

Huevo de gallina, de codorniz, de ganso o de avestruz, son los que puedes degustar si te acercas a «Cómemeloshuevos» que luce un nombre atrayente aunque algo arriesgado, también hay que decirlo, pero con un sentido del humor que a mi me encanta (ya me conocéis….si no, mirad el nombre de mi blog).

Yo he podido comer allí huevo de ganso a la cortijera (un huevo de ganso con jamón, chorizo y patatas cortijeras), un huevo de gallina «Para sibaritas» (huevo a baja temperatura, boletus glaseado y espuma de patata) y un postre al que llamaban «Chocolate con churros 5.0″……..que merece la pena probarlo. Pero no sólo de huevos puedes disfrutar en casa de Javier, también puedes probar el Salmorejo Cordobés que ha ganado el primer premio en el concurso de la Cofradía del Salmorejo Cordobés, por lo que sin duda, es un reclamo más para hacerles una visitilla.

Pero no quiero terminar con esto, en cuanto a comida también quiero destacar algo que me sorprendió muchísimo, porque en la simplicidad está el arte del sabor y os explicaré porqué. Como entrante os presentará un plato de aceite para mojar…….dicho así queda raro pero es realmente sorprendente. A nuestro oro líquido tan sólo le unen sal negra del Himalaya, o también conocida como el caviar de las especias…….¿y que ocurre?….. Una reacción simple, muy simple. Los minerales que constituyen este tipo de sal se unen al aceite de oliva virgen extra y ofrece un sabor que prefiero no desvelaros……creo que es de ley que lo probéis para que os quedéis atónitos como yo me quedé.

Pero sabéis que también me gusta valorar el conjunto de un restaurante y no es sólo la comida lo que se debe evaluar una vez que vas a visitar un lugar de disfrute, ya que como bien me dijo una buena amiga «un buen servicio te arregla una mala comida o te destroza una buena» y que razón tenía…… En este caso, el servicio va acorde a la degustación, porque Javier destaca por un trato exquisito a sus clientes, personal, cercano y muy muy correcto.

Por esto y porque sé del restaurante que os hablo, «Cómemeloshuevos» debe estar n nuestra lista de «Vámonos de tapas», porque si quieres comer huevos, tienes que pasar por la Calle Teruel, sin duda alguna.

Podéis obtener más información en su página web Cómemeloshuevos

Fotografías propias y obtenidas de comemeloshuevos.es