Vamos a hacernos hoy una ensalada diferente, una ensalada caliente de algo que a priori gusta bien fresquito como es el pepino. Os expongo lo que necesitaremos para llevarlo a cabo.

Ingredientes (4 personas):

• 2 pepinos.
• 3 cucharadas de aceite.
• 1 diente de ajo.
• 1 guindilla roja.
• 1 chorreón de vinagre de vino.
• Un puñadito de almendras fritas.
• 1 pizca de azucar.
• 1 naranja mandarina.
• Pimienta molida.
• Sal.
• Perejil picado.
• Aceite de oliva virgen extra.

Elaboración:

En primer lugar, comenzaremos lavando los pepinos y quitándole los extremos. Sin pelarlos, los cortamos en tacos de tamaño mediano.

En una sartén con un buen chorreón de aceite, añadimos el pepino para sofreirlo hasta que se doren un poquito. Una vez que hemos llegado a este punto, bajamos el fuego y añadimos el ajo muy picadito y la guindilla roja cortadita (le hemos quitado previamente las pipas para restar picor).

Rehogamos unos minutos el pepino con el ajo y echamos un chorreón de vinagre de vino (si os gusta más balsámico, podéis utilizarlo sin problema), una pizca de azúcar, la almendra frita picada y una cucharada de agua. Mareamos durante unos minutos y finalmente ponemos en su punto de sal.

Presentación:

Ya que esta ensalada conlleva un caldito adicional que nos sirve de «vinagreta caliente» vamos a utilizar un plato hondo. Espolvoreamos perejil picado sobre la ensalada y lista para comer.