Vamos a unir hoy dos ingredientes muy ricos y que nos aseguran que sirviéndolos conjuntamente van a dar un resultado muy muy bueno. Por un lado el huevo y por otro el vino tinto…….estos serán la base de nuestra receta de hoy.
Ingredientes (4 personas):
- 150 ml de caldo de carne.
- 100 ml de vino tinto.
- 2-3 ramitas de tomillo picado.
- 4 huevos.
- Sal.
- Pimienta negra molida.
- 1/4 de chile rojo.
- Pan de molde.
Elaboración:
Primero vamos a verter el caldo y el vino tinto de forma conjunta en un cazo (o en una sartén como prefiráis) y dejamos que hierva. Picamos el tomillo muy muy fino y lo añadimos a nuestro caldo y dejamos que infusione unos 5 minutos. Cortamos 1/4 de chile rojo en rodajitas y las añadimos también al caldo (Si no os gusta el pique u os gusta menos, podéis jugar con la cantidad de chile o incluso no añadirlo).
Cascamos los huevos (uno a uno porque si los echamos todos a la vez nos va a resultar muy difícil porque tienden a abrirse al ser, al fin y al cabo, escalfado en nuestro caldo) y los cocemos hasta que veamos que se nos hace la clara y la yema queda en su punto (sellada por fuera y cocida por dentro). Cuando el huevo esté dentro, vamos a ir echando el caldo caliente sobre la yema para conseguir este punto que os digo.
Una vez que se nos hayan hecho, los sacamos con una espumadera y los apartamos en un plato templado. Dejamos que el caldo siga reduciendo y para terminar el plato rociamos el caldo sobre cada uno de los huevos.
Por último, con una rebanada de pan de molde, la cortamos en bastones y pasamos por la sartén para que se nos tuesten y añadimos al plato como os parezca para darle un toque de decoración y de aporte a nuestra receta…….porque…..¿qué son unos huevos sin pan?…….