Hoy os propongo una mezcla donde vamos a unir el mar con el gambón y la tierra con el tocino del cerdo. Vamos a marcarnos un primer plato de gambones con tocino (o bacon en su caso) con un guacamole de Mascarpone muy sencillo.

Ingredientes:

• Gambones.
• Tocino de veta (o bacon en su defecto)
• 1/2 – 1 Aguacate fresco.
• Cilantro fresco.
• Unas gotitas de zumo de limón.
• 1 cucharada de queso Mascarpone.
• 1 cucharadita de ketchup.
• 1 chorreón de leche.
• Orégano.
• Sal.
• Aceite de oliva virgen extra.

Elaboración:

En primer lugar vamos a montar los gambones con el tocino.

Nosotros hemos utilizado tocino de veta curado en sal, que hemos cortado en lonchas finas, pero si no tenéis, podéis utilizar bacon ahumado sin ningún tipo de problema……aunque os recomiendo nuestra opción, claramente.

Para montar los gambones, vamos a quitarle la piel (cáscara, carcasa o como la queráis llamar) del cuerpo del gambón, dejando intactas la cabeza y la cola de este, que nos servirán de decoración y, porque no, para saborear el gusto de la cabeza, que es muy muy buena.

Una vez pelados, vamos a insertar un palillo de madera largo ( a modo de brocheta) longitudinalmente en el gambón, para asegurarnos de que se queda totalmente recto y lo podemos presentar tumbado. En el cuerpo que tenemos desnudo, vamos a envolver el tocino fijándolo con palillos de dientes para que no se nos mueva y cubra bien el cuerpo.

Ponemos los gambones en una sartén con una cucharadita de aceite de oliva virgen extra.

Para hacer el guacamole de mascarpone, no vamos a tener ningún problema. Tan sólo tendremos que machacar con esmero hasta que se nos quede una pasta muy fina y mezclada, el aguacate, el cilantro picado y el zumito de limón (que le aporta acidez y antioxidante para que no se oscurezca el aguacate). Una vez que ya hemos conseguido la pasta, añadiremos el queso mascarpone, 1 cucharadita de ketchup, un poquito de orégano y otro de sal. Mezclamos todo y por último le daremos la textura que deseemos añadiendo más o menos leche.

Presentación:

Para presentarlo, ponemos en la base del plato el guacamole de mascarpone que hemos hecho y sobre él, disponemos los gambones estirados (una vez que le hemos quitado todos los palillos de sujeción). Añadimos un poco de sal negra sobre encima y un chorreón de aceite de oliva virgen extra y ya tenemos el plato preparado para servir.

Gambones de forma diferente y con un toque muy gustoso del suave guacamole que hemos creado.