Hoy, de nuevo, vamos a dar al producto de una lata el carácter de ingrediente principal y en este caso serán las aceitunas de bote deshuesadas de toda la vida. Vamos a darle un toque especial para que tanto el emplatado como el sabor sea muy interesante para ponerlo en nuestra mesa.

Ingredientes:

• 100 g de aceitunas en lata (equivale a dos latitas pequeñas).
• 50 g de bacon en taquitos.
• 1/2 cebolla mediana.
• Queso rayado.
• Orégano picado.
• Guindilla cayena.
• 1 cucharada de mostaza.
• Sal.
• Aceite de oliva virgen extra.
• 3 – 4 láminas de pasta filo.

Elaboración.

Para hacer este plato, primero nos vamos a montar un recipiente chulo y crujiente para que nos sirva de «contenedor» de nuestra mezcla de aceitunas. Para ello cogemos 3 ó 4 láminas de pasta filo y las cortamos (unidas, porque son muy muy finas) ayudándonos de un cazo por ejemplo, para darle forma circular, o de cualquier otro instrumento para darle la forma que queramos.

La pintamos con aceite por los dos lados principales y la ponemos en un recipiente para horno, de forma que se adapte a su forma para que después nos sirva como «plato». Metemos en el horno precalentado a 180 ºC durante unos 5 – 6 minutos. Una vez pasado ese tiempo, sacamos del horno y reservamos mientras hacemos la parte principal del plato.

Para hacer las aceitunas, ponemos en un cazo o en una sartén con dos cucharadas de aceite la cebolla cortada de brunoise. La doramos un poquito y echamos el bacon en taquitos. Removemos y cuando estén ya casi hechos, añadimos las aceitunas, el orégano seco, una guindilla cayena (dependiendo de la intensidad y del gusto de cada uno) y abundante queso rayado. Removemos para que se integre todo y se nos vaya derritiendo el queso mezclándose con los demás ingredientes.

Por último, un pelín antes de sacarlo, vamos a poner la mostaza y removemos para que se nos funda con el queso y senos cree una salsa espesa de queso y mostaza. Probamos de sal y ponemos en su punto y listo para emplatar.

Presentación:

Ponemos el recipiente de pasta filo sobre un plato o una pizarra como hemos hecho nosotros y sobre este, disponemos las aceitunas calientes. Decoramos con una ramita de orégano fresco y listo para comer.